El Gran Premio de Rusia fue puesto en duda en el mismo momento en el que Vladimir Putin dio la orden de invadir Ucrania. Por tanto, la Fórmula 1 ha decidido que, en las actuales circunstancias, este año no habrá carrera en Sochi.
Cuando estalló la guerra en la madrugada del pasado miércoles, la Fórmula 1 comenzó a valorar las consecuencias de un conflicto armado tan repugnante como el que Rusia ha comenzado al invadir Ucrania.
El primero en mover ficha fue Haas, que decidió retirar cualquier referencia a Uralkali, patrocinador ruso propiedad de Dmitry Mazepin, y el futuro de dicha asociación queda en el aire.
El Mundial y los equipos toman la decisión de no visitar Sochi como consecuencia de la invasión de Ucrania por parte del país liderado por Vladimir Putin
La F1 ve imposible la celebración de la carrera
Desde la jornada de ayer, se había puesto en duda la continuidad del Gran Premio de Rusia, marcado en el calendario del Mundial para celebrarse a finales de septiembre. Sebastian Vettel tomó la delantera en una rueda de prensa al afirmar que no correría en el circuito de Sochi si finalmente se optaba por mantener la visita, mientras que Max Verstappen consideró que no era correcto correr en un país en guerra.
El campeonato, sin embargo, guardó silencio por la mañana, y se limitó a decir que estaban “controlando lo que estaba sucediendo”. Pero lo cierto es que debía afrontarse un debate sobre la continuidad de la cita, algo que los equipos hicieron junto a Stefano Domenicali, CEO de la Fórmula 1, la pasada noche.
Y la decisión ha sido clara. La Fórmula 1 ha anunciado esta tarde que el Gran Premio de Rusia queda cancelado como consecuencia de los acontecimientos de las últimas horas. En un escueto comunicado, han explicado su decisión.
“El Mundial de Fórmula 1 visita países de todo el mundo con una visión positiva para unir a la gente, juntando a las naciones. Estamos observando los acontecimientos en Ucrania con tristeza y conmoción y esperamos una resolución rápida y pacífica de la situación actual. El jueves por la noche la Fórmula 1, la FIA y los equipos discutieron la posición de nuestro deporte, y la conclusión es, incluyendo la opinión de todas las partes interesadas, que es imposible celebrar el Gran Premio de Rusia en las circunstancias actuales”, ha sostenido el campeonato.
Así, cae la que debía ser la última carrera de la Fórmula 1 en Sochi, pues desde 2023 el plan es que el Gran Premio de Rusia se disputara en el circuito de Igora Drive, cercano a la ciudad de San Petersburgo. Aunque habrá que ver si el campeonato y la FIA mantienen su relación con la cita una vez que finalice el actual conflicto bélico. Sobre una posible sustitución, el circuito de Estambul se ha posicionado como principal favorito para las últimas horas para acoger un nuevo Gran Premio de Turquía.