Segunda pole position de la temporada para Valtteri Bottas después de la que lograse en Portugal. El finés fue el único de los Mercedes que aguantó en su posición tras la mala salida de Lewis Hamilton, con Verstappen sacando partido.
Dispar resultado obtuvo Mercedes en la carrera Sprint que se desarrolló en la pista de Monza, con el triunfo de Valtteri Bottas y la mala largada de Lewis Hamilton, quien no pudo recuperarse para avanzar y arribó en el quinto puesto, sin sumar puntos.
Si bien ganó, el finlandés deberá penalizar en el Gran Premio de Italia largando último por haber llegado al límite de cuatro cambios de motor en su unidad. De todas maneras, fue implacable en la competencia de 18 vueltas, sosteniendo un ritmo que le permitió controlar las diferencias.
Detrás suyo arribó Max Verstappen, quien con el Red Bull obtuvo dos puntos para el campeonato y ahora cuenta con cinco de ventaja sobre Hamilton. Por si fuera poco, el domingo el neerlandés largará desde la primera posición en la pista italiana.
La variedad estratégica en cuanto a la elección de los neumáticos marcó la puesta a punto inicial de cada uno de los pilotos: los dos McLaren fueron los únicos en montar el compuesto más blando de la gama de Pirelli, mientras que el resto de los integrantes del Top 10 no escatimó en gomas y optó por el medio. Aston Martin y Alpine emularon el enfoque de los de Zak Brown, interpelando toda una declaración de intenciones.
Como era de esperar, la salida no defraudó: Lewis Hamilton cayó en picado tras reportar un ligero toque, con Max Verstappen heredando la segunda posición al tanto que Pierre Gasly perdía su sexta plaza al perder su alerón delantero e ir directo contra las protecciones, lo que derivó en un Safety Car.
La mala salida del #44 fue totalmente opuesta a la de Daniel Ricciardo, quien se encaramó en la tercera plaza y recibió los continuos envites de su compañero de equipo al reiniciarse la acción en la pista. Valtteri Bottas ejecutó una relanzada de libro que le permitió desembarazarse de Verstappen y el DRS del #33, al mismo tiempo que Fernando Alonso llamaba a la puerta de los diez primeros.
Remontada frustrada
Vuelta tras vuelta, sin cejar en su empeño, Hamilton intentó dar cuenta de Lando Norris sin éxito, lo que provocó que sus neumáticos medios se consumiesen más de lo normal y se viese en una situación similar a la del piloto de McLaren en lo referente a desgaste.
Por su parte, Sergio Pérez tenía sus más y sus menos con Lance Stroll: el mexicano adelantó al canadiense haciendo uso de la escapatoria de las dos primeras curvas, le tocaba devolver la posición y, apenas una vuelta después, rebasó definitivamente al #18. De esta batalla intentó sacar tajada Alonso, aunque, si bien estuvo muy cerca de pasar a Stroll, un cerrojo del piloto de Aston Martin antes de abordar la curva arruinó cualquier posibilidad de lograrlo.
Sin que nadie le molestase, Bottas gestionó de forma efectiva un margen que llegó a superar los 2 segundos frente a Verstappen. Carlos Sainz, en pista tras verse envuelto en un grave accidente en la última sesión de entrenamientos libres, vio cómo Charles Leclerc se tomaba la venganza y se la devolvía, relegándole a una posición más atrás que no le afectó después del abandono de Gasly.
Las disputas entre Red Bull y la FIA a causa de una investigación pendiente por el rifirrafe entre Pérez y Stroll se dejaron oír en la retransmisión, una riña que se resolvió con la decisión consecuente de no emprender más acciones en este sentido.
