La temporada 2019 del DTM ha cerrado sus puertas con una carrera pasasa por agua en la que Nico Müller ha logrado la victoria.
Mike Rockenfeller y René Rast han completado el último podio del año en Hockenheim, además de cerrar el triplete de Audi.
Nico Müller ha puesto el broche a 2019 en el DTM con una victoria con la que ha confirmado su subcampeonato. A pesar de partir desde la pole, el piloto suizo del equipo Abt Sportsline ha tenido que lidiar con una pista en condiciones complicadas para asegurar su tercer triunfo de la temporada. Mike Rockenfeller y René Rast han cerrado el podio en Hockenheim y el triplete de Audi tras completar sendas remontadas en una carrera llena de alternativas y percances por culpa de las condiciones meteorológicas. Pese a no tener un desempeño tan brillante como en el día anterior, Jenson Button terminaba como mejor piloto del Súper GT.
Comenzaba la última carrera del DTM con ciertas dificultades. La duración de la última manga del año se reducía a 49 minutos por culpa de las condiciones climáticas. A cambio se daban dos vueltas de formación, aunque al final este procedimiento se extendía a tres giros por los problemas del Aston Martin del escocés Paul Di Resta. No duraba mucho más en acción su compañero Dani Juncadella, toda vez que el DTM del piloto español se incendiaba tras romper su motor. La carrera se detenía bajo bandera roja y no se reiniciaba hasta 15 minutos después, dando así a los aficionados una nueva ‘salida’.
No obstante, el inicio primigenio había dejado grandes emociones, pese a que Nico Müller conseguía retener la primera posición sin grandes problemas. De hecho, los duelos entre Mike Rockenfeller, Timo Glock y Marco Wittmann permitían a René Rast colocarse segundo. El campeón pasaba así a convertirse en serio candidato a la victoria de una carrera en la que también causaba baja de manera precipitada Nick Cassidy. El piloto de Lexus recibía un toque de Jonathan Aberdein, golpeando las barreras antes de la bandera roja. Más tranquilo era el reinicio tras esta, con Nico Müller manteniendo su liderato por delante de René Rast.
Con esta segunda ‘salida’ se daba también el metafórico pistoletazo de salida a las paradas en boxes. Ronnie Quintarelli era uno de los primeros pilotos en parar con el Nissan GT-R, en un movimiento que imitaba Jenson Button una vuelta después. En el grupo de cabeza, el alemán Mike Rockenfeller se adelantaba a sus rivales y ganaba la posición a Marco Wittmann, si bien el piloto de BMW terminaba por ser penalizado por un toque con Jonathan Aberdein. Por su parte, Nico Müller perdía la posición con René Rast en el cambio de gomas, si bien lograba hacer funcionar los neumáticos antes para volver a superar al campeón.
Con Nico Müller como líder virtual de la carrera, sólo las paradas tardías de Jamie Green y Joel Eriksson alejaban a los espectadores de ver la situación real de la carrera. Con todo, Müller terminaba por ‘recoger’ su liderato sin mayor oposición, toda vez que René Rast perdía comba hasta ser incluso superado por Mike Rockenfeller. Ya no había cambios de posiciones de ningún tipo en los puestos de cabeza y Nico Müller aseguraba su tercera victoria del año, triunfo con el que además confirmaba el subcampeonato. Por su parte, Mike Rockenfeller y René Rast se hacían con los dos puestos restantes del podio.
Jamie Green y Joel Eriksson hacían funcionar sus estrategias para cerrar terminar quinto y sexto, sólo por detrás del BMW de Timo Glock. Por su parte, Jake Dennis se convertía en el mejor piloto de R-Motorsport tras cosechar una sorprendente octava posición a espaldas de Robin Frijns, superando incluso a Bruno Spengler y Loïc Duval, pilotos que cerraban el ‘top 10’. Por detrás, Jenson Button volvía a ser el mejor piloto del Súper GT, aunque el británico no podía pasar del 17º puesto con el Honda NSX-GT. Pese a todo, el rendimiento del británico ha sido mucho más sólido que el ofrecido por el resto de los ‘wild card’.