Onofre Pinocho Marimón, el único cordobés que corrió en F1, fue la primera víctima fatal de la máxima categoría.
Sucedió en los primeros años del Campeonato Mundial de Fórmula 1. En 1954, durante la cuarta temporada oficial de la máxima categoría, había cuatro argentinos corriendo y todos en equipos de primera, sí: Juan Manuel Fangio, con Mercedes (ya había sido campeón en 1951, con Alfa Romeo); José Froilán González, con Ferrari; y Roberto Mieres y Onofre y Onofre “Pinocho” Marimón, con Maserati. Pinocho, nacido en Zárate el 19 de diciembre de 1923 y radicado de pequeño en Cosquín, fue el primer hijo de Domingo Marimón, barcelonés instalado en beneficio de su tuberculosis en Punilla y que en 1948 ganó el Gran Premio de la América del Sur de Turismo Carretera, la competencia que trascendió como “la Buenos Aires-Caracas” y que tuvo nada menos que 9.574 kilómetros. La profunda amistad de Toscanito -como le decían a Don Marimón- con Fangio hizo que Pinocho llegara a correr en F1.
La historia cuenta que Onofre era, además de ahijado, discípulo predilecto del balcarceño, quien había movido sus contactos para conseguir que lo sucediera en Maserati.
NÜRBURGRING, FATAL
1954 arrancó muy bien para los pilotos de nuestro país; sobre todo, para Fangio, que ganaba por primera vez el GP de Argentina, y repetía victoria en Bélgica y Francia. Froilán subía a lo más alto del podio en julio en Gran Bretaña, donde tres años atrás había dado a Ferrari su primer triunfo en la F1. Y en esa misma carrera de Silverstone del ´54, Pinocho Marimón podía revertir una nefasta racha de abandonos y acompañaba a Froilán en el podio, desde el tercer lugar. Para el 1° de agosto, llegaría el difícil circuito alemán de Nürburgring; sinuoso; encerrado por los árboles, dramáticamente cubierto de neblina.
En la previa y como buen maestro, Fangio le había propuesto a Pinocho que lo siguiera durante las prácticas para marcarle la trayectoria ideal. El discípulo, sin embargo, decidió salir solo. Detrás, enseguida, partió Fangio, quien en unos instantes y entre la bruma apenas distinguió que el Maserati 250F de Marimón se fugaba alocado de la pista. Rumbo a la muerte.
De tal palo
Como su padre Domingo, Onofre Marimón corrió en TC y con Chevrolet. Debutó en F1 en el GP de Francia ´51; participó en 12 carreras, con dos podios y un récord de vuelta.