La pretemporada 2020 de Fórmula 1 ha comenzado por fin en el Circuit de Barcelona-Catalunya.
La mayor parte de los pilotos no perdieron ni un minuto para aprovechar al máximo la jornada inaugural, primera de seis.
En esa primera «competición» de la temporada, George Russell se adelantó por escasos metros a Carlos Sainz, saliendo ambos a pista nada más ponerse el semáforo en verde. Sin duda supone un contraste considerable con respecto a 2019, cuando el Williams FW42 no pudo debutar hasta la tercera jornada.
Una vez hecha la primera toma de contacto con una pista soleada pero aún algo fría, los pilotos comenzaron rápidamente a marcar los primeros tiempos, con Carlos Sainz estableciendo las primeras referencias competitivas y acumulando vueltas con facilidad utilizando el compuesto C2, el segundo más duro de los cinco que Pirelli suministra este año (los mismos que en 2019, tanto en cantidad, como en estructura y compuestos).
Como es habitual en esta primera fase de la pretemporada, el primer objetivo es establecer comparaciones aerodinámicas con los datos de la simulación, por lo que pronto las parrillas de sensores y la parafina fluorescente invadieron los monoplazas de todos los equipos.
«Tras la primera hora, Carlos Sainz mantenía el mejor registro al haber logrado una vuelta de 1:18.423s»
Tras la primera hora de actividad, Carlos Sainz mantenía el mejor registro al haber logrado una vuelta de 1:18.423s, estableciendo un margen de medio segundo sobre el nuevo Racing Point RP20 de Sergio Pérez, aunque el mexicano se colocó al borde del 1:17 pasados 20 minutos.
Poco más tarde, Valtteri Bottas fue el primero en romper esa barrera mientras Max Verstappen superaba ya las 50 vueltas completadas con su Red Bull RB16 motorizado por Honda. Ya al filo de las tres horas de actividad, el finlandés de Mercedes volvía a rebajar el tiempo, estableciendo un mejor crono provisional de 1:17.313s, 62 milésimas por delante de Pérez, 474 por delante de Verstappen y 688 por delante de Sainz.
Ya entrada la última hora de actividad matinal y con el asfalto superando los 15 ºC de temperatura, cuatro eran los pilotos que habían superado la cincuentena de vueltas al circuito de Montmeló: Bottas, Verstappen, Sainz y George Russell con el Williams, que ya rodaba más rápido con el FW43 de lo que lo hizo con su antecesor durante toda la pretemporada en 2019.
Así se llegó al primer parón de mediodía sin ninguna bandera roja que reseñar (salvo un trompo de Kevin Magnussen sin consecuencias), quedando una vez más demostrada la extraordinaria fiabilidad de los monoplazas actuales de Fórmula 1.
«Cambio de planes para los test de Fórmula 1: Sebastian no se encuentra bien esta mañana, así que Charles Leclerc se queda a cargo de sus labores hoy», informó Ferrari, antes de que el ruido de las pruebas de pretemporada comience en Barcelona.
El alemán, que estaba designado para subirse a la SF1000 en la primera jornada de test, sufrió una indisposición por la noche y se presentó en el circuito catalán, donde participó de la foto oficial, pero no estaba en condiciones físicas para conducir.
De esta manera, la Scuderia dispuso del monegasco, quien iba a compartir el segundo día, girando por la mañana, adelantó su turno.