Una vez más, Will Power inició el mes de mayo ganando el Gran Premio de Indianapolis, con la esperanza de volver a ser contendiente en las 500 millas.
El australiano abrió su cuenta de triunfos en la IndyCar de 2018, al prevalecer en la quinta edición de la competencia en el circuito mixto del Speedway, en la que tuvo que ahorrar suficiente combustible para llegar a la meta,
A pesar del stint de 27 vueltas que se vio obligado a elaborar, no perdió tiempo en lograr una distancia de más de dos segundos sobre Scott Dixon, por lo que no tuvo problemas para alzarse con la victoria No. 33 de su trayectoria, además de convertirse en el hombre más exitoso en la carrera que se lleva a cabo en este trazado.
De esta forma, Power le entregó a Team Penske su triunfo No. 200 en el automovilismo de monoplazas en Estados Unidos, con lo que se vuelve a demostrar la hegemonía de la organización más importante dedicada al deporte motor en este país. 33 han sido de parte del campeón de 2014, quien está a un triunfo de igualar a Al Unser Jr. en el octavo sitio del ranking de todos los tiempos.
Dixon, quien arrancó en el sitio 18, logró su mejor resultado del año, al liderar un grupo que hizo una estrategia alterna que le permitió recuperar terreno en el periodo bajo bandera verde. Robert Wickens,el retador principal de Power desde el comienzo de la jornada, completaron el podium, siendo el segundo en la joven carrera del canadiense en el serial.
Sébastien Bourdais se quedó con la cuarta plaza en la última vuelta, al dejar atrás a Alexander Rossi, aunque ambos hicieron un importante negocio en el campeonato ya que quien llegó como líder general, Josef Newgarden, cometió un error durante la segunda mitad del recorrido, al intentar superar a Bourdais y trompear en la curva 12; el estadounidense finalizó en la posición No. 11.
Gabby Chaves llegó en 17º sitio, en tanto que Kyle Kaiser fue 19º, no sin antes liderar una vuelta con el equipo argentino Juncos Racing, en una competencia llena de estrategias y ahorro de combustible.