El mexicano realiza un test de dos días en Imola con un Ferrari de 2023 para prepararse de cara a la temporada 2025 con Cadillac.
Sergio Pérez ha vuelto a ponerse al volante de un monoplaza de Fórmula 1 tras casi un año de ausencia, participando en un test de dos días en Imola con un Ferrari de 2023. La prueba forma parte de su preparación para debutar con Cadillac en su primer año en la F1.
El piloto mexicano, que puso fin a su etapa de cuatro años en Red Bull antes de tiempo, aprovechó su primera pausa significativa en la competición desde hace casi dos décadas para pasar tiempo con su familia y evaluar su futuro profesional. Tras estas reflexiones, Pérez firmó con Cadillac para participar en el debut del equipo estadounidense en la Fórmula 1.

Al no contar Cadillac con un programa de pruebas de monoplazas anteriores, el equipo llegó a un acuerdo con Ferrari para que Pérez pudiera rodar con un coche de dos temporadas atrás, permitiéndole recuperar sensaciones y protocolos propios de la F1. Además, parte del equipo de Cadillac se encuentra en Imola trabajando junto al personal de Ferrari que gestiona su programa TPC, consolidando la colaboración entre ambos equipos.
La prueba, que se desarrolla jueves y viernes, incluyó la realización de un asiento a medida para Pérez en Maranello la semana pasada. El piloto ha completado su puesta a punto física y ha utilizado estos días para evaluar su estado físico y familiarizarse nuevamente con los procedimientos en pista, siguiendo un programa que le permita estar en óptimas condiciones para el pretemporada del próximo enero.
Preparación y adaptación: el primer contacto de Pérez con Cadillac
Pérez destacó la importancia del test para medir su condición física y comenzar a trabajar con ingenieros y mecánicos del equipo estadounidense. Desde que firmó con Cadillac durante el verano, el mexicano ha participado en múltiples sesiones de simulador y ha visitado regularmente las bases del equipo en Reino Unido y Estados Unidos.
En la temporada 2025, Pérez formará dupla con Valtteri Bottas, quien también cuenta con un año de inactividad en F1 como piloto reserva de Mercedes. Bottas, sin embargo, deberá esperar hasta el final de la temporada actual para poder rodar con Cadillac, ya que sigue bajo contrato con su equipo hasta entonces.
