Los grandes vencedores de la salida fueron los Red Bull de Checo Pérez y Max Verstappen, que ganaban posición con Carlos Sainz y George Russell respectivamente. Al ataque también salía Norris, a quien le costaba solo nueve vueltas entrar en la zona de puntos. Más tranquilo estaba Leclerc, que, tras conservar gomas al inicio, puso una diferencia de hasta tres segundos con Oscar Piastri.

Fernando Alonso tendría como rivales a los Williams de Franco Colapinto y Alex Albon, este último con el neumático duro. Los de Grove llamaron a boxes al argentino en la vuelta 11 para atacar al asturiano, que se defendía una vuelta después, manteniendo posición.

Albon y Norris, invitados de excepción

Estos movimientos desataron también las paradas arriba. Verstappen y Russell pararon en la vuelta 13, al igual que Hamilton, cuyas quejas al neumático medio eran constantes. En Ferrari no existían dichas quejas, ya que el ritmo de Leclerc era excelente, llegando a una ventaja de seis segundos con Piastri.

Pérez subió también el ritmo, y decidió lanzar un undercut a Piastri. Checo salió detrás de Norris, que pudo pararlo hasta que el australiano hizo su parada dos vueltas después del mexicano. Pese a ese frenazo de Lando, Checo estaba muy cerca del de McLaren, que también se quedó muy cerca de Leclerc tras la parada del monegasco en la vuelta 17. Sainz fue de los últimos en cabeza en parar, saliendo por detrás de un Pérez bloqueado por Albon, que no había hecho aún su parada.

Comienza la batalla

Piastri, oliendo sangre, no titubeó tras tener delante otra vez a Leclerc, y en el primer intento le robó la cartera en la curva 1 tirándose por sorpresa al más puro estilo de su compatriota Daniel Ricciardo. Leclerc buscó no perder la estela del de McLaren, pero por el retrovisor veía una mancha azul oscuro: el Red Bull de Checo Pérez. La pelea por la victoria se cocía a fuego lento a tres bandas.

Sin embargo, a Leclerc no le cuadraba el ritmo de sus rivales: «O no están conservando, o tienen más agarre que nosotros», dijo por radio a su ingeniero Bryan Bozzi. ¿Iban Piastri y Pérez a dos paradas?

Norris saca el orgullo

Al que se le acumulaban los problemas era a Max Verstappen. El neerlandés se las vio y se las deseó para adelantar a Lando Norris, aun por parar, y confirmaba los peores presagios de sus aficionados: reportaba problemas de frenos por la radio. En un circuito crítico para este elemento, no eran noticias muy halagüeñas. Estos dos pilotos se encontraron con Albon, también con estrategia de neumático duro de inicio, y que sería un soplo de ayuda para Norris en su defensa de Verstappen… y de Russell, que se acercaba al neerlandés.

Tras unos momentos de calma tensa, Leclerc volvió a abrir la veda tras conservar ligeramente sus gomas. El primer intento llegó en la vuelta 29 por el exterior de la curva 1, pero Piastri tapó bien el hueco. Dos vueltas después, Charles procedió del mismo modo, con similar desenlace. El tercero fue el más claro, pero tampoco pudo, mientras Norris cambiaba de ritmo tras la parada de Albon y se separaba de un Verstappen que acusaba la falta de agarre en las ruedas traseras y comenzaba a defenderse de Russell. Pero poco pudo hacer cuando perdió el DRS de Norris, y quedó completamente indefenso ante la increíble velocidad punta del inglés, que le arrancaba las pegatinas.

La pelea del top-3 beneficiaba a Carlos Sainz, con aire limpio por delante y que recortaba casi un segundo por vuelta a Pérez. En el otro lado del muro empezaban los juegos de la radio, ya que las órdenes a Leclerc eran claras: «Box contrario a McLaren». Orden que no cumplía, y que parecía un anzuelo en el que no picó McLaren.

Tras mostrar un gran ritmo con los duros, Norris paró en la vuelta 38, saliendo séptimo a 15 segundos de Verstappen y con 14 vueltas para terminar. Su objetivo era claro: recortar puntos, por pocos que sean. Y aunque Max apretaba con récords personales, Norris era imparable, recortando un segundo por vuelta.

Leclerc se rinde

El ritmo de Leclerc en el tramo final de la carrera era altamente superior al de Piastri, pero la defensa del australiano era férrea. Ante los ataques del monegasco en la curva 1, Oscar se mantenía frío por el interior dejándole el espacio mínimo sin ventaja.

La pelea por el triunfo no era la única, ya que por detrás se cocían dos batallas: Norris recortaba un mundo por vuelta a Verstappen, y Alex Albon se acercaba peligrosamente a un Fernando Alonso que ocupaba la octava plaza.

Los ataques de Leclerc a Piastri le costaron caro a final de carrera, y con tres giros para terminar comenzó a languidecer con problemas en los neumáticos traseros, lo que aprovecharon Pérez y Sainz para lanzar ataques.

Norris, con un ritmo endiablado, aprovechó su primera oportunidad de adelantar a Max Verstappen para ponerse sexto. Objetivo cumplido, pero tal vez sepa a poco.

Un final accidentado

Pérez tuvo diversas oportunidades ante un Leclerc totalmente indefenso, y a dos vueltas del final le pasó en la recta de meta, pero el monegasco apuró la frenada de la curva 1 y forzó al mexicano, que perdió posición con Sainz. El madrileño salió mal de la curva 2, dejando oportunidad a Checo. Pero en plena recta, con el DRS abierto un enganchón entre ambos tras un leve giro de Sainz a la izquierda acabó con ambos pilotos en el muro, accidente que puso punto y final a la carrera con un Coche de Seguridad Virtual.

Oscar Piastri ganó el Gran Premio de Azerbaiyán, por delante de Charles Leclerc. George Russell heredó el podio tras este incidente, mientras Norris salvó los muebles con una cuarta plaza. Verstappen terminó quinto, Alonso sexto, y los dos Williams en los puntos.

Franco Colapinto hizo historia al convertirse en el primer argentino en sumar puntos en más de cuatro décadas.

McLaren ha sacado partido, hoy sí, a las circunstancias, y adelanta a Red Bull en el Mundial de Constructores. En el de Pilotos, Max Verstappen mantiene el tipo, ya que Norris solo le recorta tres puntos.

La Fórmula 1 no descansa y pone rumbo a Singapur, donde se celebrará el Gran Premio el próximo fin de semana.