Por segundo año consecutivo, Fernando Alonso protagonizó el primer accidente fuerte en las actividades rumbo a las “500 Millas de Indianápolis”.
El español tuvo un día bastante productivo en las cinco primeras horas de prácticas de este jueves, completando 126 vueltas, colocándose sexto en los tiempos generales y séptimo en registros sin succión.
Sin embargo, mientras practicaba en un grupo de seis autos, tomó la Curva 4 de tal manera que tocó la zona de cemento y perdió adherencia, lo que lo envió a la pared. Ya sin control, su máquina trompeó y quedó en la entrada de la zona de pits, sin tener más golpes.
“En este lugar, las paredes se ven muy cerca”, comentó Alonso a la transmisión oficial, después de recibir el alta del Centro Médico del autódromo. “Así es la manera en la que esto va”.
“Desafortunadamente pasó de nuevo hoy, pero esperemos que (solo) pase hoy y no el (día) 23”.
Hace un año, Alonso protagonizó el primer accidente significativo en los entrenamientos, que fue el desencadenante de una serie de eventos “cómicos”, según Zak Brown, que incluyó un pintado incorrecto del coche de reserva, la pérdida de tiempo en el último ensayo antes de calificación y errores técnicos básicos que terminaron por dejarlo fuera de la parrilla.
Esto no pasará este año, ya que en lugar de ser un programa aparte, la de Alonso es una tercera inscripción de ARROW McLaren SP; además, espera que su máquina sea reparable y un vehículo de repuesto no sea necesario
“Aprendes cada vuelta que haces aquí. Aprendimos de esto, no hubo nada que pudiéremos hacer, esperamos mañana comenzar de nuevo, todo va yendo más o menos bien hasta ahora, esperemos mantener un buen trabajo y no (tener) más problemas”, aseguró.
Cuando restaba menos de una hora para el final de la segunda jornada de prácticas, el español del equipo Arrow McLaren SP pisó la zona de cemento en el vértice de la curva 4 y perdió el control de su monoplaza hasta estrellarse contra el muro. Ya sin control, su auto trompeó y quedó en el ingreso del pitlane.
