La espera tiene su recompensa y el premio al fin llegó para José María López en el Campeonato Mundial de Resistencia, y nada más y nada menos que en Fuji, la casa de Toyota.
El cordobés tomó el mando del vehículo Nº7 en la vuelta 147 y deslumbró con su actuación en pocos minutos. El piloto de Río Tercero registró récord de vuelta y estiró la diferencia con respecto a Fernando Alonso, quien en ese entonces se encontraba al mando del Toyota Nº8.
Cuando se cumplieron 206 vuelta, Pechito ingresó al pitlane para cederle su lugar a Kamui Kobayashi y desde ese instante, el japonés se encargó de mantener la distancia con respecto al segundo vehículo de la escudería, el cual pasó a manos de Kazuki Nakajima. El trío conformado por André Lotterer, Neel Jani y Bruno Senna fue el encargado de cerrar los tres primeros lugares.