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Ogier, a la caza de su quinta victoria récord en Italia con un Toyota GR Yaris, entró en el tramo aferrándose a un escaso liderato en la general. Sin embargo, en un sorprendente giro del destino, la suerte del francés sufrió un dramático revés al salirse de la carretera y volcar por un terraplén apenas 1,4 km después del inicio.
Lappi redujo su ataque al ver el coche siniestrado de Ogier, cediendo sin querer, más de medio minuto a Neuville, su compañero de equipo en el i20 N, que no era consciente del drama que se desarrollaba a sus espaldas en la carretera. El belga ascendió del tercer al primer puesto de la general gracias a su ataque y encabeza el doblete de Hyundai con 36,4 segundos de ventaja de cara al planteamiento de los cuatro tramos finales del domingo.
«Me siento aliviado por haber llegado a la meta», admitió Neuville, que no gana un rallye desde Japón el año pasado. «Ha sido un día duro ahí fuera, pero las sensaciones con el coche eran cada vez mejores. Hemos aprendido mucho, eso es importante, pero todavía no es siempre perfecto y aún podemos mejorar.
«Mañana es un día corto pero complicado», añadió. «Tenemos que pilotar con inteligencia e intentar traer a casa el doblete para el equipo».
El líder del campeonato, Kalle Rovanperä, se ha colocado tercero a expensas de su compañero de equipo, aunque es poco probable que el finlandés pueda poner en aprietos a la pareja de cabeza en cuanto a ritmo. Se quedó a 1 minuto 14.3 segundos de Lappi al final del día tras verse perjudicado por el excesivo desgaste de los neumáticos por la tarde.
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La perseverancia dio sus frutos a Elfyn Evans, cuya jornada estuvo llena de contratiempos. El Toyota del galés sufrió daños en el radiador en un paso de agua en el TC10 y perdió casi tres minutos volviendo, cojeando a la asistencia.
La historia amenazó con repetirse más tarde, cuando el coche de Evans perdió momentáneamente potencia mientras sorteaba otro paso de agua. El fallo se solucionó poco después y llegó a la meta a casi cuatro minutos de Rovanperä, cuarto en la general.
Ott Tänak y Takamoto Katsuta no tuvieron tanta suerte y ambos tuvieron que abandonar por culpa del agua. Un sensor eléctrico defectuoso fue el culpable del abandono de Tänak, piloto del M-Sport Ford, mientras que Katsuta se retiró con daños en el radiador.
Sus respectivos percances permitieron a Dani Sordo, que se recuperaba de un volcar el viernes por la mañana, escalar hasta la quinta posición de la general. Encabezó la clasificación Adrien Fourmaux, líder del WRC2, mientras que Andreas Mikkelsen, Teemu Suninen, Emil Lindholm y Kajetan Kajetanowicz, todos ellos participantes en el WRC2, completaron la tabla de posiciones.