El sudafricano Sheldon Van der Linde se ha proclamado campeón del DTM, segundo de la era GT3 del certamen alemán. El piloto de BMW y de Schubert Motorsport coge así el testigo de Maximilian Götz como nuevo rey del certamen tras acabar tercero en la última carrera de la temporada. Un fin de fiesta en el que Marco Wittmann se ha anotado el triunfo y René Rast ha sido segundo, sin poder evitar con este resultado el título de Sheldon.

El sudafricano Sheldon Van der Linde se ha proclamado campeón del DTM, segundo de la era GT3 del certamen alemán. El piloto de BMW y de Schubert Motorsport coge así el testigo de Maximilian Götz como nuevo rey del certamen tras acabar tercero en la última carrera de la temporada. Un fin de fiesta en el que Marco Wittmann se ha anotado el triunfo y René Rast ha sido segundo, sin poder evitar con este resultado el título de Sheldon.

Marco Wittmann se convertía en el mejor aliado de Sheldon Van der Linde al batir en la salida a René Rast. Con todo, el líder del campeonato cuajaba una perfecta salida para mantener la sexta plaza en un arranque mucho más limpio que el vivido 24 horas antes. De hecho, el único toque reseñable afectaba al Porsche #92 de Christian Engelhart, aunque también es cierto que la parrilla del DTM hoy apenas tenía 19 coches tras las bajas de ayer.

Sheldon Van der Linde es el nuevo campeón. El Team Schubert se ha anotado el título por equipo y Audi el de marcas

Con el objetivo de no dejar nada al azar, Sheldon Van der Linde adelantaba a Marius Zug y Dev Gore a la vez para asaltar la cuarta posición y colocarse al frente del pelotón perseguidor de los tres pilotos de cabeza. Un movimiento que generaba cierto caos y que permitía a Lucas Auer escalar hasta el sexto puesto. El piloto de Mercedes conseguía ganar hasta cinco posiciones, pero se veía superado por Nico Müller poco después.

Marius Zug hacía labor de marca al adelantar a Sheldon Van der Linde, potenciando así las opciones de René Rast. Movimiento que, entre otras cosas, provocaba que Sheldon Van der Linde y Lucas Auer fueran dos de los primeros pilotos en pasar por boxes. Auer conseguía ganarle la partida a Kelvin Van der Linde y Dev Gore con esta estrategia, mientras que Sheldon Van der Linde hacía lo propio con Marius Zug.

Visto para sentencia

René Rast lanzaba un ‘undercut’ a Marco Wittmann justo después y aunque estratégicamente no funcionaba puesto que el piloto de BMW salía por delante tras su parada un giro después, la diferencia de temperatura de los neumáticos sí valía para que Rast se pusiera líder virtual en pista tras ser empujado incluso por Wittmann fuera de la trazada. Con todo, un pequeño error de Rast le entregaba de nuevo el liderato a Wittmann.

Desde ese momento, Marco Wittmann conseguía más de dos segundos de renta sobre René Rast, mientras que Sheldon Van der Linde se hacía con la tercera posición virtual, dejando muy encarada la carrera y la consecución del título. Además, con la parada de Maro Engel todo ya quedaba en una posición real, con Wittmann al frente de la carrera por delante de Rast y Van der Linde a falta de 20 minutos.

Doble éxito para BMW

A pesar de restar más de un tercio de carrera, la sensación en Hockenheim es que ya no había espacio para cambios. Y así era. Marco Wittmann se anotaba el triunfo por delante de René Rast y Sheldon Van der Linde, resultado que suponía un doble éxito para BMW. En términos inmediatos, la marca de Múnich aseguraba un doblete en el podio con Wittmann y Van der Linde. Sin embargo, el doble éxito más importante era a nivel global.

El título de Van der Linde se veía correspondido con el campeonato por equipos de Schubert Motorsport. Por su parte, René Rast en su última carrera como piloto de Audi era punta de lanza para asegurar el título de fabricantes. Colaboraban en esta misión Marius Zug con su cuarto puesto y Kelvin Van der Linde, piloto encargado de completar el ‘top 5’ de una carrera en la que sólo doce GT3 veían meta.