Dani Sordo ha aprovechado su posición de salida para firmar un notable bucle y colocarse como primer líder del rally.
Teemu Suninen y Sébastien Ogier completan el podio provisional en Cerdeña. Adrien Fourmaux y Oliver Solberg mandan en WRC2 y WRC3.
Dani Sordo está de vuelta. Con un solo rally del WRC disputado en 2020, prueba que además terminó con problemas para el cántabro, muchos podían pensar que el piloto de Hyundai estaría falto de ritmo cuando se diera el pistoletazo de salida al Rally de Italia-Cerdeña. Nada más lejos de la realidad. Si bien se ha visto beneficiado por el orden de salida, Dani Sordo ha dejado claro que va a por la victoria en los tramos sardos y que su único objetivo es repetir el triunfo que logró en 2019. De momento, Sordo va por el camino correcto a pesar del buen hacer del finlandés Esapekka Lappi.
Arrancaba la primera etapa del Rally de Italia-Cerdeña sin lluvia, con una monta de neumáticos en la que los Michelin LTX Force M6 -medios- ganaban la partida y en que la mayor diferencia pasaba por llevar cinco o seis neumáticos en el coche para la disputa de los cuatro primeros tramos del rally. Con este escenario, el factor limpieza de los tramos se hacía notar y Teemu Suninen firmaba el scratch en el SS1 por delante de Esapekka Lappi y Dani Sordo. Por su parte, Elfyn Evans y Sébastien Ogier tenían que asumir su penitencia por abrir pista con sus Toyota.
.El soberbio scratch de Teemu Suninen en el revirado y falto de grip SS1 servían como aperitivo de la gran actuación de Dani Sordo. El piloto cántabro ponía la directa en la primera pasada por ‘Erula – Tula’ y dejaba patente su enorme ritmo con el Hyundai i20 WRC Coupé. De hecho, Sordo superaba por 7,1 segundos a Teemu Suninen en el SS2 para colocarse a la estela del finlandés en la general, mientras que Sébastien Ogier escalaba hasta el tercer puesto sacando una vez más rendimiento a su Toyota Yaris WRC del que se podía esperar siendo el segundo en saltar al tramo.
Con Esapekka Lappi fuera de la ecuación tras sufrir problemas en su Ford, la dinámica no era la misma en la segunda pasada por los dos tramos que abrían la cita italiana. De hecho, el factor limpieza ya no surtía tanto efecto y los líderes del WRC asomaban la cabeza. Elfyn Evans se anotaba así el scratch en el SS3 por delante del propio Sébastien Ogier, mientras que Dani Sordo cedía muy poco terreno con ambos. De nuevo un anticipo al gran golpe en la mesa del cántabro, ya que Sordo lograba el scratch en el SS4 para colocarse como nuevo líder de la prueba.
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Cerraba así Sordo el primer bucle del rally al frente con 7,5 segundos de renta con Suninen. Pese a sus esfuerzos por frenar la hemorragia con ellos, Sébastien Ogier ocupa la tercera plaza a 17,6 segundos de Sordo, aunque con el trabajo hecho al superar por seis segundos a Elfyn Evans. Con todo, el papel de los dos pilotos de Toyota está siendo notable en relación a Thierry Neuville o Kalle Rovanperä, pero sobre todo respecto a un Ott Tänak que con algún problema y sin ritmo ha cedido casi dos minutos con el líder. De hecho, el estonio es noveno, beneficiado incluso por la baja por salida de pista de Takamoto Katsuta.
En lo que respecta al resto de categorías, Adrien Fourmaux está al frente de la clase WRC2 tras titubear en el SS2 y reponerse en los dos siguientes tramos. De hecho, el francés tiene una renta de 15,7 segundos sobre Pontus Tidemand, mientras que Ole Christian Veiby está ya a más de 43 segundos. Por su parte, en WRC3 el liderato es para Oliver Solberg, aunque con un estrecho margen sobre Yohan Rossel. El líder Marquito Bulacia es octavo y Jan Solans, lastrado por un pinchazo, está fuera de carrera. Por último, Tom Kristensson está al mando en el Junior WRC.