Fórmula 1: Vettel conquista el territorio de Hamilton

Sebastian Vettel ha pegado un golpe sobre la mesa en la casa de Lewis Hamilton. Si el británico lanzaba la primera ofensiva en la clasificación del sábado, el alemán ha respondido con un contraataque el domingo para llevarse una meritoria victoria en el Gran Premio de Gran Bretaña. Los Safety Cars han marcado un final trepidante en el que Mercedes y Ferrari se han enfrentado cuerpo a cuerpo. Hamilton fue segundo, minimizando daños, y Kimi Räikkönen, tercero.Fernando Alonso volvió a obrar el milagro con un octavo. Carlos Sainz se retiró tras sufrir un accidente con Grosjean.

Decepcionante salida de Hamilton. El británico, sin tracción, perdió varias posiciones tras apagarse el semáforo. Un par de curvas después, se agravaba el mal inicio al recibir un toque de Räikkönen. Hamilton quedó trompeado en medio de la pista, quedando relegado a la parte posterior de la parrilla. El de Mercedes debería remontar en casa con un coche que, posiblemente, podía tener algún daño tras el impacto.

Vettel tomó el liderato de la la carrera y comenzaba a meter margen sobre Bottas y Verstappen. Por detrás, un sorprendente Sainz ya era noveno cuando salía desde el 16º cajón de la parrilla. Hamilton iniciaba su remontada; tras siete vueltas ya estaba a la cola del español. Los comisarios, tras analizar el incidente entre el británico y Räikkönen, sancionaban al piloto de Ferrari con 10 segundos de penalización

Räikkönen fue el primero en parar de los hombres de cabeza, en la vuelta 14. Hamilton proseguía con su fulgurante remontada. También pasaban por el pit lane los dos Red Bull y el británico ya era tercero sin haber hecho su paso por boxes. Por detrás, Leclerc decía adiós tras un error durante su parada; uno de sus neumáticos estaba mal ajustado y debía aparcar el coche fuera de la pista. Malísima suerte para el monegasco, quien venía protagonizando un fin de semana espectacular.

Hamilton hizo su parada en la vuelta 24. La carrera se centraba por momento en la batalla entre Magnussen y Alonso por la novena posición. También Ricciardo entraba en boxes, aunque en su caso era la segunda parada. El australiano optaba por regresar al compuesto blando; el medio no estaba siendo positivo para su ritmo.

El punto de la carrera llegó en la vuelta 33 con al salida del Safety Car. Ericsson perdió el control del su Sauber al tomar una curva con el DRS abierto. En consecuencia, perdió la parte trasera del monoplaza y terminó contra las protecciones. Accidente fuerte, aunque sin consecuencias para el sueco. Muchos pilotos aprovecharon para volver a entrar en boxes, como Vettel, Verstappen, RäIkkönen o Alonso. Bottas optaba por mantenerse en pista y colocarse como nuevo líder de la prueba.

La relanzada no duró demasiado, aunque suficiente para ver uno de los adelantamientos del año de Verstappen a Räikkönen por la parte sucia de la pista. Sainz buscó el adelantamiento sobre Grosjean, aunque el galo terminó contactando con el español cuando ya le tenía ganada la posición. Los dos contra el muro y nuevo Safety Car en pista.

El final de carrera fue uno de los más emocionante del año. Tras la relanzada, Vettel trató de adelantar a Bottas durante varias vueltas, aunque el alemán no conseguía encontrar el hueco. Bottas se defendía como gato panza arriba. Los cuatro primeros se compactaban, era una lucha directa, cuerpo a cuerpo, entre Ferrari y Mercedes. Los italianos con el neumático blando nuevo y los alemanes con un duro más usado.

Finalmente, Vettel consiguió adelantar a Bottas con una agresiva pero limpia maniobra en el mismo punto donde lo venía intentado desde hacía minutos. Los neumáticos del finés decían basta y también perdía posición con Hamilton y Räikkönen. La última sorpresa la protagonizó Verstappen tras abandonar por un problema mecánico.

Duro golpe de Vettel a Hamilton en casa de Hamilton, muy dolido nada más bajarse del coche. El alemán refuerza su liderato, con el británico segundo y Räikkönen tercero en el podio. Alonso fue octavo, tras una nueva y magistral lección de pilotaje; sobrepasando los límites racionales de su McLaren.