Las opciones de Sebastian Vettel de luchar por la victoria en el Gran Premio de Austria han sufrido un revés. El piloto alemán ha sido sancionado con tres posiciones en parrilla por estorbar a Carlos Sainz durante la clasificación. De esta manera, el de Ferrari se verá obligado a remontar desde la salida tras mostrarse como el principal rival de los Mercedes a lo largo del fin de semana.
Sainz se encontraba en una vuelta rápida cuando se encontró con Vettel rodando lento en la trazada de la primera curva, una acción por la cual el de Renault mostró su descontento emparejándose con el germano en la siguiente recta del Red Bull Ring. Vettel justo había terminado su vuelta rápida y pensaba que Sainz, a quien adelantó con anterioridad, había entrado en boxes.
Al contrario de lo que anticipó Vettel, Sainz comenzó su vuelta lanzada y cerró rápidamente la distancia que separaba a ambos pilotos. El germano admitió que no vio al madrileño en sus retrovisores y que no recibió información por parte de Ferrari sobre la situación de Sainz. Los comisarios decidieron investigar lo sucedido y optaron por castigar a Vettel acorde a acciones similares que sucedieron en el pasado. Además de la sanción en parrilla, también recibió un punto de penalización en su carnet.
Así, Vettel comenzará la carrera en Austria desde la sexta posición tras clasificar en tercer lugar. El de Ferrari tendrá que lidiar con la amenaza que suponen los Red Bull muy cerca de su puesto de salida, además de tener justo al lado a un renacido Romain Grosjean, quien lo dará todo en la salida para sumar sus primeros puntos de la temporada. En un circuito donde las diferencias son mínimas, Vettel se verá obligado a realizar una buena arrancad para no perder tiempo con los Mercedes.