El punto de ‘crossover’ con el neumático intermedio, la clave de hoy
El objetivo de la prueba, según nos ha definido el jefe de ingenieros de Pirelli, Mario Isola, era doble: por un lado, se quiere mejorar el punto de ‘crossover’ con el neumático intermedio con alguno de los prototipos de compuesto y dibujo. Dicho con otras palabras, se ha intentado que durante el proceso de secado de la pista, después de la lluvia, haya más vueltas en las que el neumático de agua extrema es todavía útil y funcional sin una degradación total antes de cambiarlo por el intermedio.
Por otro lado, Pirelli pretende mejorar el comportamiento del neumático en caso de aquaplanning, no tanto por la cantidad de litros evacuados por segundo, que también, sino por el modo en el que el coche se comporta cuando se produce el aquaplanning. La casa milanesa pretende que la pérdida de contacto del neumático con el suelo se produzca de una forma más progresiva que hasta ahora, para mayor seguridad y espectáculo en pista cuando la lluvia hace acto de presencia.
El fabricante no se atreve a dar un balance definitivo de las pruebas –»lo sabremos en una semana«, dice Isola–, pero sí anticipa que las sensaciones son positivas y que no descartan una actualización de ese compuesto, el de
agua extrema.
Isola también ha señalado la precisión y profesionalidad de Sebastian Vettel que, como los demás pilotos, ha tenido que rellenar un cuestionario sobre sus sensaciones en cada tanda, que no ha podido corroborar con la telemetría ni con indicaciones de sus ingenieros. Lo cierto es que Ferrari ha trasladado a Le Castellet a su primer equipo de ingenieros, con Jock Clear como nuevo director de ingeniería y la habitual pareja de Dave Greenwood (Kimi Räikkönen) y Riccardo Adami (Vettel), mientras que McLaren ha trabajado con el llamado equipo de test, que en realidad son ingenieros de rendimiento (‘performance‘) del equipo de Woking.
El equipo de Maranello también nos ha confirmado que ha utilizado un motor usado para esta prueba; así pues, los rumores por los que se suponía que Ferrari iba a poder utilizar el motor homologado pero no estrenado en el GP de Abu Dhabi, con los cuatro tokens que nunca se aplicaron en pista, carecen de fundamento.
MENOS LITROS
A primera hora, el lago artificial del que extraen el agua para regar la pista ya languidecía después de los tres millones de litros esparcidos ayer por la pista, pero el programa previsto para hoy ha sido menos agresivo, ya
que durante gran parte de la jornada Pireli se ha centrado en reproducir las condiciones de una pista que se seca, esto es, el momento en el que los neumáticos de agua extrema empiezan a degradarse rápidamente por falta de
agua y se demuestran más rápidos los intermedios (los marcados de verde en el flanco).
El mejor tiempo de la jornada ha llegado precisamente, en la última tanda, y con el Ferrari de Sebastian Vettel equipado con neumáticos mixtos sin marcar. En esa misma tanda, Stoffel Vandoorne ha montado las gomas de
mojado y ha marcado tiempos claramente peores, así que digamos que se había superado ese momento clave en el que merece la pena cambiar de neumático. Encontrar ese momento era, como antedicho, una de las prioridades de Pirelli hoy.
Los equipos nos han explicado que no ha habido presencia de personal de la FIA para vigilar que no se han montado piezas nuevas o inadecuadas –sí había uniformes con el logo de la Federación, pero no eran comisarios técnicos–, sino que ha imperado la autocensura en la configuración de los coches y respeto al personal de Pirelli, que necesitaba coches lo más estándar posible y lo más similares a lo que los ingenieros ya conocían de
todo el año 2015.
RED BULL ‘PINCHA’ EN LA ÚLTIMA TANDA
Como ayer, la tabla de tiempos resulta insustancial, pero sirva comentar que Vettel ha parado el crono en un 1’06″750 por delante del 1’06″833 de Daniil Kvyat y el 1’07″758 de Stoffel Vandoorne. Algo más importante ha sido el ‘forfait’ de Red Bull en la penúltima tanda de trabajo del día. Daniil Kvyat ha podido llevar su coche a boxes, pero sin completar las últimas 15 vueltas previstas. Un problema técnico, después de 113 vueltas, es el que les ha recluido en boxes, el único junto a un amago de fallo de McLaren que le ha obligado a recortar ligeramente una de las tandas, pero que no ha obstaculizado el desarrollo del resto de la jornada. En cualquier caso, sólo Ferrari ha podido completar las dos jornadas enteras sin ningún problema reseñable.
Con esta prueba de Pirelli, hemos visto en pista por última vez los coches del año pasado, y también el canto del cisne sus motores. La próxima vez que rujan, que será en el Circuit de Barcelona-Catalunya el próximo 22 de
febrero, lo harán con los chasis y propulsores nuevos. La nueva Fórmula 1 está a la vuelta de la esquina.