Un 4 de noviembre, como hoy, pero de 1962, finalizaba el “Gran Premio Internacional de Autos de Turismo” triunfaban las suecas Ewy Rosqvist de 32 años y Ursula Wirth de 31 años, con Mercedez Benz 220 SE, las suecas súper profesionales junto a Mercedes Benz, previo a la carrera, recorrieron la ruta, haciendo una etapa por día, para descansar la jornada siguiente y anotar los detalles del camino. Cuando llegó la noche de inicio de la carrera, la ansiedad por la gran carrera se hizo enorme. Largaban 287 competidores, divididos en siete clases por cilindrada. La largada fue frente a la sede del ACA, para hacerlo en forma efectiva desde Pilar rumbo a Villa Carlos Paz.
Mercedes Benz aparte del auto para las suecas trajo tres Mercedes 300SE para Peter Khunne, Eugen Bhoringer y el argentino Carlos Menditeguy. El quíntuple, Juan Manuel Fangio, quien era presidente honorario de Mercedes Benz en el país, fue designado director General del equipo, tarea que compartió con Karl Kling, realizando una gran tarea como cuando fueron compañeros en la Fórmula Uno.
En medio de la noche, después de la partida real en Pilar, la impresionante cantidad de participantes avanzaba a ritmo de carrera, por Río Cuarto, “Charly” Menditeguy, aventajaba a su compañero Bhoringer por más de dos minutos, perseguidos por los Volvo 122, mientras las suecas se mantenían tranquilas en el lote puntero.
Ya en tierra Cordobesa, los Volvo de Andersson y Viale pasan a la vanguardia, seguidos de las suecas, tan cerca que a los pocos kilómetros ya estaban al frente de la clasificación. Cuando se acercan a Villa Carlos Paz, Menditeguy logra recuperar terreno y supera a Ewy Rosqvist sobre la misma línea de llegada, pero no puede impedir que las suecas le ganen en tiempo por un segundo. Las rubias suecas están en la vanguardia desde el mismo inicio de la carrera y deben defender los prestigios de la marca alemana.
Al paso por la provincia de San Luís, sufre un accidente el Mercedes de Hermann Khuenne, quien pierde la vida, casi se retira el equipo, por consejo de Fangio, quien sugiere homenajear a su compañero continuando en carrera. La pareja de Suecas ganaban la segunda etapa y son comadas ganadoras en la clasificación general afirmándose en la punta. Luego ganan la etapa de Tucumán, y repiten el triunfo en Catamarca, Córdoba y en la última a Arrecifes, con ritmo y precisión, sin cometer errores.
Sorprendían por su pulcritud y so coquetería al llegar con los labios pintados para que las salude un público sorprendido en el que prevalecían las mujeres, que se sentían
reivindicadas por estas dos rubias.
Finalmente, tras ganar las seis etapas, triunfan en la general con una ventaja de tres horas y ocho minutos sobre el segundo, Boris Garafulic (Volvo) y también en su categoría por 12 horas sobre Marcelo Borchardt, que tripula un Jaguar 3.800. Toda una hazaña y con récord.
La actuación de las suecas Ewy Rosqvist y Ursula Wirth constituyó un hito en el automovilismo argentino. Desde entonces, para los aficionados, serían simplemente “las suecas”.