En la primera competencia de las tres que definirán el campeonato de la Copa Mundial de Turismo, Esteban Guerrieri finalizó en el cuarto sitio con el Honda Civic Type R del equipo Münnich Motorsport luego de largar desde la décima colocación.
El de Mataderos, quien pelea con Norbert Michelisz (Hyundai) por el título, colocó un mix de neumáticos para la largada (slicks adelante y para lluvia detrás) y fue avanzando en el pelotón hasta terminar en la cuarta posición.
Néstor Girolami, quien partió tercero, aguantó para que Esteban pudiera escalar y, sobre el final, se retrasó hasta el 21º lugar.
Esteban Guerrieri no se rinde y tras protagonizar una excelente segunda carrera en Sepang, cita de la décima y última cita de la temporada, venció con el Honda Civic Type R del equipo Münnich Motorsport y quedó a diez puntos del húngaro Norbert Michelisz, quien llegó 8º con el Hyundai.
En la largada, Guerrieri realizó una excelente partida pese a la condición de pista adversa por la lluvia y rápidamente se colocó quinto, mientras que Michelisz se retrasó en el pelotón y Néstor Girolami se posicionaba al tope de la fila.
Sin embargo, Esteban se la jugó por afuera en las curvas sucesivas y se colocó al frente de la fila, con Bebu como escolta, pero un toque entre Nick Catsburg e Yvan Muller provocó que el Hyundai del holandés tuviera un principio de incendio, lo que determinó que se detuviera la prueba con bandera roja.
Luego de más de una hora de demora, por la intensa lluvia, los comisarios determinaron que se largara nuevamente pero como estaban antes del incidente, por lo que Girolami se ubicó en el primer cajón de la grilla y Guerrieri en el segundo.
Con la nueva partida, el de Mataderos se tiró por afuera en la primera curva, Girolami obviamente no le opuso resistencia (el cordobés terminó 4º) y se encaminó hacia su cuarta victoria de la temporada.
«Fue una carrera increíble, salí a todo o nada, quedamos en la primera posición tras largar novenos, y luego de la segunda largada, Bebu me dejó pasar y una vez que tomamos la punta, el ritmo del auto era muy bueno. Ahora trataremos de dejar todo nuevamente; se van a divertir», expresó Esteban, quien partirá segundo en la tercera carrera, al lado de Michelisz.
Esteban Guerrieri estuvo cerca de la heroica. El argentino, quien llegaba como uno de los candidatos a la corona, tenía que ganar y que Norbert Michelisz finalizara cuarto o peor para consagrarse en la Copa Mundial de Turismo. Y en los primeros giros, así fue.
Esteban se la jugó desde el inicio y pasó al frente de la competencia tras la largada, en tanto que Michelisz perdió con Mikel Azcona (Cupra) en los primeros metros y luego con Johan Kristoffersson (VW Golf), pero la velocidad se neutralizó por un despiste de Augusto Farfus.
En el reinicio, en la quinta vuelta, Azcona se tiró a pasarlo al argentino y lo logró, pero el de Mataderos recuperó la punta por unos segundos. Sin embargo, Azcona, con el auto más liviano, pegó nuevamente el zarpazo, con golpe incluido, algo que perjudicó a Guerrieri, quien se despistó unos metros, la toma de aire se llenó de césped y se fue retrasando en el pelotón con un problema de temperatura en el Honda Civic Type R hasta el 22º puesto.
«Se aprende de estas cosas, son infortunios que suceden. Me pega Azcona, estábamos peleando bien pero él sale a la recta, no tenía el auto puesto y me pega. Se me llenó de pasto el radiador y comenzó a levantar temperatura. Es un trago amargo, pero ya está. Le agradezco a todos los que me acompañaron. Dimos todo, no se dio, pero cuando no pasan las cosas como uno quiere, se aprende y hay que ir por la revancha», comentó el subcampeón de la categoría.
Néstor Girolami, con el otro Honda, culminó 9º y también cerró una buena temporada.