WRC: Tänak se aferra al liderazgo en Portugal

EL SÁBADO POR LA NOCHE, EL LIDERATO EN EL VODAFONE RALLYE DE PORTUGAL DE OTT TÄNAK, PENDÍA DE UN HILO DESPUÉS DE UN FINAL DRAMÁTICO EN EL PENÚLTIMO TRAMO.

Se aferra a una ventaja de 4,3 segundos sobre Kris Meeke, compañero de Toyota Gazoo Racing, tras sufrir daños en la suspensión delantera derecha de su Yaris, lo que le dejó cojeando en la última especial, la más larga del rallye, con casi 40 kilómetros.

Un problema idéntico para su compañero de equipo Jari-Matti Latvala, al otro lado del coche, dejó al finlandés en segundo lugar antes de la misma especial después de que estuviera en camino de negarle a Tänak una segunda victoria consecutiva en el WRC.

Los problemas con los frenos en el tramo de apertura ralentizaron a Tänak y las dos victorias de especial de Latvala redujeron la ventaja del estonio de 17,3 segundos a 5,1 segundos.

Latvala dañó su suspensión después de un fuerte aterrizaje en el primer tramo de la tarde. Luchó en el siguiente antes de detenerse, dejando a Tänak a 15,2 segundos de Meeke antes de que el líder se metiera en problemas.

«Veinticinco kilómetros antes de la llegada rompimos el amortiguador delantero derecho. Cinco kilómetros después me desvié en una curva y tuve que retroceder. Ha sido una especial difícil. Mañana, si no hay problemas, debería ser un buen día», dijo Tänak.

Los tres primeros puestos están separados por 9,2 segundos, ya que Thierry Neuville ganó las dos últimas especiales con su Hyundai i20 y se acercó a 4,9 segundos de Meeke.

Un problema hidráulico hizo que Meeke no pudiera usar el freno de mano en la última especial, que estaba llena de paellas. El británico limitó la pérdida de tiempo para mantenerse por delante de Neuville y preparar una batalla vibrante por el podio de mañana.

Las altas temperaturas, el polvo en suspensión y las pistas escabrosas aseguraron que la etapa, que abarcaba más de la mitad de la distancia competitiva del rallye, fuera un desafío agotador.

El líder del campeonato, Sébastien Ogier, fue cuarto con su Citroën C3, a 21.0 segundos de la cabeza y sufriendo una involuntaria doble dosis de tácticas por parte del equipo Hyundai de Neuville.

Con Dani Sordo y Sébastien Loeb sin opciones tras los problemas de presión de combustible de ayer, el equipo coreano les ordenó que incurrieran deliberadamente en penalizaciones de tiempo al caer por debajo de la orden de salida para situarse después de Ogier y por delante de Neuville.

Esto significaba que Ogier tenía dos coches menos antes que él para barrer la graviella suelta de la pista y proporcionar una línea más limpia y rápida.

Su compañero de equipo Esapekka Lappi subió de octavo a quinto, saltando por encima de Teemu Suninen, que estaba casi medio minuto por detrás en un Ford Fiesta.

Gus Greensmith se retiró en la última especial después de estrellar su Fiesta en una zanja, lo que le permitió a su compañero de equipo Elfyn Evans llegar a la séptima posición. El líder del WRC 2 Pro, Kalle Rovanperä, el compañero de equipo de Skoda Fabia, Jan Kopecký, y el líder del WRC 2, Pierre-Louis Loubet, completaron los 10 primeros puestos.

El final del domingo es el más corto del fin de semana. Cinco tramos de arena incluyen una doble pasada sobre el famoso tramo de Fafe, la segunda de las cuales es el Wolf Power Stage con puntos extra para las cinco tripulaciones más rápidas. El total es de 51,77 km.