Maverick Viñales se dio el gusto de terminar primero en la última jornada de test de Qatar y de toda la pretemporada. ‘Mack’ coge moral. A una vuelta está muy fuerte. Sorprendente Quartararo y los ‘pesos pesados’ regresan a su lugar.
La actividad en pista comenzó más tarde de lo habitual por el fuerte viento que había en Losail, con rachas de más de 30 km/h. Dovizioso, Márquez y Lorenzo fueron los primeros en salir. Bradley Smith y Johann Zarco sufrían sendas caídas. Marc lograba dar cinco vueltas seguidas. Poco a poco, su hombro le permite alargar más las tandas.
Las Suzuki marcaban la pauta. Rins se colocaba al frente hasta que su compañero Joan Mir evidenciaba su crecimiento en la pista qatarí. Hacía 1:55.321. Pronto era Álex el primero en bajar de 1:55. Petrucci y luego Márquez, en su primer toque de atención serio de la pretemporada, le arrebataban la posición de honor. El de Cervera ya fijaba el registro en 1:54.613.
Esto coincidía con tres caídas casi simultáneas. Rins, en la curva 2, Nakagami, en la 9 y Crutchlow, en la 16.
El viento había bajado y todos apretaban para buscar un gran crono. Maverick Viñales fue el más certero. Marcó 1:54.208, que es el mejor tiempo de todos los días. La sorpresa llegaba con Fabio Quartararo. El francés, que ya en el segundo ensayo había acabado en el ‘top 10’, se ponía segundo con un gran 1:54.441. El novato dejaba a muchos sin palabras… y sin argumentos al criticar su salto a MotoGP. La Yamaha suele ser ‘fácil’ para un debutante, pero los cronos no engañan.
Márquez se iba a suelo en la curva 5, un giro de derechas. Dañó algo su moto, aunque, físicamente, su hombro no resultó tocado (foto de Gigi Soldano). Tito Rabat, igualmente, besó el asfalto.
Aleix Espargaró y Danilo Petrucci fueron los únicos que hicieron una simulación de carrera casi completa. El de Aprilia estuvo en 1:56 bajos constantemente. El de Ducati lo hizo mejor. Rodaba en 1:55 medios, aunque empeoró al final, con más frío, haciendo 1:56 bajos.
Dos veteranos huían de la parte baja. Jorge Lorenzo, que seguía preocupado por su posición sobre la Honda, y Valentino Rossi, se ponían entre los cinco primeros. El Doctor, que había sido crítico -«no estamos para ganar»-, como siempre, mejoró al final a poco que buscó una vuelta buena. Yamaha, de hecho, colocaba a sus cuatro motos entre los seis primeros. Losail suele ser una buena pista para los de los diapasones y en 2019 pinta igual.
Lorenzo sufría su primera caída desde que está en Honda. Se accidentó en la curva 2. Entró por su propio pie al box, aunque la montura estaba bastante dañada. Bagnaia y Oliveira tenían otros incidentes.
El frío hizo que muchos acortaran el test. Preparados o no, ya no tendrán más ensayos. La próxima vez que estén sobre sus máquinas será en el Gran Premio de Qatar, del 8 al 10 de marzo.