Mercedes eligió la mañana de este jueves para presentar su nueva arma de carreras, el F1 W09 EQ Power+, el noveno vehículo construido por el fabricante alemán desde que desembarcara en el Fórmula 1 tras adquirir el equipo campeón de ese año, Brawn GP, antiguamente, el equipo de Honda.
En Mercedes han buscado rizar el rizo, necesario para seguir manteniéndose en la élite tras ganarlo todo desde 2014, desde que comenzó la era híbrida de la Fórmula 1.La marca de la estrella tiene ante sí la oportunidad de sumar cinco títulos, superando la racha precedente, la de Red Bull de 2010 a 2013 e igualar los cinco títulos consecutivos de la Ferrari de Michael Schumacher, de 2000 a 2004.
Para ello, y teniendo en cuenta que se trata de la base del vehículo, a la que se le irán añadiendo evoluciones, Mercedes ha presentado un modelo repleto de pequeños detalles, con infinidad de aletines, sobrecargando de estos elementos las zonas más críticas para la aerodinámica, llamando la atención tanto su reducido tamaño en el capó motor, como su esquema de suspensiones, visualmente similar tanto delante como detrás.
El equipo ha descartado hacer una presentación convencional, y a pesar de que el aficionado estaba citado para un breve directo, desde primera hora de la mañana, Mercedes ha ido dejando pinceladas de su nuevo vehículo, tanto en forma de foto como de vídeo, hasta que finalmente se ha presentado de forma oficial, eso sí, tras completar un ‘filming day’ en el circuito de Silverstone, con una menor cantidad de lluvia que la que tuvo que soportar Red Bull, y también, sin ningún tipo de incidencia.
Ahora el equipo pone rumbo a España, donde este lunes comenzarán los test de pretemporada, el comienzo de un año donde Mercedes parte como favorita y donde amenaza con seguir dominando, para desesperación de equipos y aficionados rivales.
