El canadiense se quedó este domingo con el Gran Premio de Long Beach, una de las carreras más prestigiosas de la categoría, siendo la primera vez que llega al Círculo de Ganadores desde hace casi dos años, en el circuito de Nueva Orleans.

En el medio, ocurrió el accidente en las prácticas de las “500 Millas de Indianapolis” que casi le cuesta la vida. En el medio, transcurrieron cuatro meses de rehabilitación y una temporada inconsistente, en la que logró la pole para la 100° edición de las “500’s” y una derrota bastante dolorosa en Texas.

Por ende, la celebración fue emotiva.

El piloto de Schmidt Peterson Motorsports se benefició de dos banderas amarillas que se ajustaron a su estrategia de dos detenciones, además de que rivales como Ryan Hunter-Reay, quien estaba en la misma secuencia, fue uno de los que experimentaron fallas mecánicas conforme se acercaba la definición.

Tras un sprint final de tres vueltas, contuvo la presión del francés Sébastien Bourdais para lograr su quinta victoria en 91 participaciones en la categoría.

Bourdais, quien consolida su liderato general con Dale Coyne Racing, y Josef Newgarden, en su segunda participación con Team Penske, completó el podium, en un día en el que los cuatro pilotos de Andretti Autosport tuvieron fallas mecánicas; tanto Hunter-Reay como Marco Andretti, Alexander Rossi y Takuma Sato se quedaron varados en pista, siendo el californiano quien provocó el encadenamiento que pudo definir la victoria a favor del canadiense.

Y es que Scott Dixon parecía destinado a luchar por el triunfo con una estrategia de tres pit stops, al no dejar de bajar el ritmo y comenzar a reducir un déficit de 20 segundos sobre los punteros.

Sin embargo, el momento en el que apareció el auto de seguridad no permitió, de acuerdo con las reglas, que cuatro coches rezagados se fueran al final del pelotón, por lo que no pudo atacar por el podium y quedó cuarto.

Aun así, el neozelandés es cuarto en la tabla general, solo un punto detrás de Simon Pagenaud, quien se repuso a una penalización durante las clasificaciones para ser quinto.

Los otros pilotos de Penske no tuvieron suerte: Will Power se involucró en un accidente con Charlie Kimball en la primera vuelta de la competencia, lo que lo condenó a finalizar 13°, un giro detrás del ganador.

El colombiano Carlos Muñoz finalizó séptimo, en una carrera sin errores y con detenciones que le permitieron avanzar lugares, logrando así su mejor resultado en este circuito desde el podium de 2014.

A pesar del dominio de Honda durante el fin de semana, las fallas de los vehículos de Andretti hicieron que la marca japonesa se repartieran el Top 10, en partes iguales, con Chevrolet, aunque se ha quedado con las dos pruebas de la campaña.

Después de dos fechas, Bourdais lidera el campeonato con 19 unidades de ventaja sobre Hinchcliffe y 22 ante Pagenaud.

La siguiente fecha de la IndyCar será el domingo 23 de abril, en Birmingham, Alabama.

INDYCAR SERIES 2017

RESULTADOS: TOYOTA GRAND PRIX OF LONG BEACH